Tres presuntos cazadores furtivos de rinocerontes comidos por leones
Armas y restos de seres humanos fueron hallados en la zona donde se encuentran los leones en una reserva de caza en Sudáfrica.
Cuando el 3 de julio estaba finalizando, se encontraron las armas y restos de tres presuntos cazadores furtivos de rinoceronte en Sibuya, una reserva de caza en Sudáfrica. Conforme a informes locales, parece que una manada de leones se los devoró.
Según se informa, los perros de una unidad contra la caza furtiva reaccionaron a algo inusual en un patrullaje mañanero el lunes, pero no fue hasta el martes a la tarde que vieron un cráneo en la zona de los leones. Ahí fue cuando el propietario de la reserva, Nick Fox, salió con una unidad contra la caza furtiva para investigar.
En el lugar, se divisaron provisiones (bolsas, armas y pan) diseminados por todos lados. “Los restos de seres humanos también se veían claramente", Fox le comentó al medio sudafricano HeraldLIVE. Estaba demasiado oscuro el martes por la noche para seguir investigando en condiciones seguras, por lo que el miércoles, la unidad regresó y tranquilizó a los leones para poder rastrear la zona.
Fox junto con otras personas encontraron que solo había quedado el cráneo y algunas piezas de hueso pélvico de los cazadores que, aparentemente, fueron atacados. Se cree que eran tres hombres porque encontraron tres pares de zapatos y guantes. "El equipamiento recolectado en la zona de los leones nos proporciona evidencia de una intencionalidad ilegal", afirma el equipo de Fox.
"Estaban armados entre otras cosas, con un rifle de alto calibre con silenciador, un hacha, cortaalambres, y tenían provisiones de alimentos para varios días (todas características de un grupo que intenta matar rinocerontes y sacarles sus cuernos)", Fox le comentó a RNEWS, un medio local. Se han llamado helicópteros para buscar sobrevivientes que puedan estar escondiéndose entre los densos arbustos.
La caza furtiva de rinocerontes es una crisis constante en Sudáfrica, donde vive el 80 por ciento de la población de este tipo de animal. En 2007 solo se mataron 13 rinocerontes ilegalmente, pero para 2017 esa cifra aumentó a más de mil.
La semana pasada, un medio local informó que dispararon y mataron a un rinoceronte blanco de nombre Bella para poder sacarle un muñón de cuerno de solo 2,5 cm. Una semana antes, a ella y a otros dos rinoceronte se les habían quitado los cuernos para protegerlos de potenciales ataques. Bella y su cría vivían en la reserva Kragga Kamma, solo a unas pocas horas en automóvil al oeste de Sibuya.
En este caso, sin embargo, la naturaleza fue más fuerte. No sorprende que los leones vieran a los tres humanos caminando y en los densos arbustos y pensaran en ellos como comida. “Casi todos los organismos cerca de los leones pueden ser considerados como una potencial presa, y que las personas se consideren la excepción es un pensamiento imprudente", comentó Luke Dollar, director del programa Iniciativa de felinos grandes de National Geographic en 2015.
Las víctimas del ataque de los leones no han sido identificadas todavía, pero el vocero de la policía, el Capitán Mali Govender, señaló que el rifle que se encontró en la reserva "será enviado al laboratorio de balística para determinar si ha sido utilizado anteriormente en alguna otra caza furtiva o en algún otro delito".