Estos 7 dragones no respiran fuego, pero son muy reales
Uno produce cianuro. Otro se come a los suyos, pero podría comerte a ti si quisiera. En el año del dragón, echa un vistazo a las criaturas de la vida real que hacen honor a sus nombres.
Los dragones de Komodo utilizan su lengua bífida para "oler" a sus presas. Es una de las especies de dragones reales más famosas del mundo.
El 10 de febrero, comunidades de toda Asia y su diáspora celebraron el comienzo del nuevo año según el calendario lunar. Según el zodiaco chino, 2024 es el año del dragón de madera.
Estos seres son la única criatura mítica entre los 12 animales del zodiaco. El último año del dragón fue 2012, y cada ciclo está asociado a un elemento (que también está en un ciclo repetitivo de madera, fuego, tierra, metal y agua).
Aunque los dragones no estén basados en hechos reales, hay algunos animales de la vida real con características muy parecidas.
1. Un nuevo "dragón diminuto"
En enero de 2024 se descubrió una nueva especie de lagarto canguro septentrional (Agasthyagama) en las montañas Ghats occidentales del sur de la India. Los investigadores describen al reptil, que mide apenas 10 centímetros de largo, como un "dragón diminuto".
En efecto, sus garras, hocico puntiagudo y larga cola recuerdan a la mítica bestia, solo que de tamaño diminuto. Curiosamente, los lagartos han aprendido a erguirse y a correr sobre sus dos patas traseras.
Agasthyagama beddomii es endémica de los Ghats occidentales, también conocidos como cordillera de Sahyadri, en la India.
2. Dragón marino rubí
Nos vestimos de rojo cuando queremos destacar, pero para el dragón marino rubí, "es una táctica de camuflaje en la profundidad", señala Josefin Stiller, que ayudó a filmar al dragón por primera vez en el oeste de Australia.
Como "el rojo es el primer color del espectro que se filtra" bajo el agua, estos peces parecen negros, lo que les ayuda a esconderse de los depredadores, explica Stiller.
Es probable que no tengan los mismos apéndices de camuflaje en forma de hoja que el dragón de mar foliado y el dragón marino común para pasar desapercibidos.
Además, a diferencia de sus primos, los machos de dragón marino rubí llevan a sus crías bajo la cola, no en el vientre.
3. Dragón azul
Este precioso nudibranquio de tan solo 5 centímetros de longitud está lleno de sorpresas.
"Se pasan la vida flotando boca abajo en la superficie del océano y tragan aire para mantenerse a flote", explica Ángel Valdés, especialista en babosas marinas de la Universidad Politécnica Estatal de California, Estados Unidos.
La babosa marina dragón azul roba células urticantes de las carabelas portuguesas para defenderse.
Así se mantienen cerca de sus presas, como la famosa y venenosa carabela portuguesa.
El dragón azul roba células urticantes, llamadas nematocistos, a las carabelas portuguesas y las almacena en órganos especializados situados en las puntas de sus cerata o alas, lo que explica su nombre.
Si se ve amenazado por un depredador, el nudibranquio descarga las células urticantes, describe Valdés.
4. Milpiés dragón rosado
Los científicos descubrieron el milpiés dragón rosado en 2007 en la región tailandesa del Gran Mekong.
Puede que el impactante milpiés dragón rosado no respire fuego, pero libera cianuro.
Este colorido artrópodo, que se cree que solo vive en las cuevas calizas de la región, se defiende produciendo cianuro. No es exactamente fuego, pero casi.
5. Dragón de Komodo
Este sí que podría comerte. El dragón de Komodo mata a sus presas con una combinación de veneno y dientes lacerantes que lo introducen rápidamente en la carne de la víctima.
Hay un animal lo suficientemente valiente como para enfrentarse a ellos. "Los principales depredadores de los dragones de Komodo son otros dragones de Komodo", explica Robert Espinoza, de la Universidad Estatal de California en Northridge.
Como los adultos se comen a los juveniles, se ven muy pocas crías al aire libre.
6. Dragón negro
Esta malvada belleza de aspecto alienígena fue una vez una adolescente torpe.
En su fase larvaria, la hembra del pez dragón negro tiene unos pedúnculos oculares que pueden alcanzar la mitad de la longitud de su cuerpo y le permiten ver más lejos en las profundidades. A medida que crece, sus ojos retroceden y le salen dientes enormes, hileras de órganos productores de luz que recubren el cuerpo y una protuberancia del mentón parecida a un bigote.
Los machos, en comparación, son diminutos y desdentados, y solo viven lo suficiente para aparearse.
(Podría interesarte: 5 curiosidades que no conocías sobre los lagartos, el grupo más diverso de reptiles)
7. Dragones voladores
Estos lagartos del sudeste asiático y la India se camuflan bastante bien, hasta que despliegan sus "alas".
Según Jim McGuire, especialista en lagartos voladores de la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos, los dragones voladores se deslizan por las copas de los árboles gracias a sus coloridas membranas, unas estructuras parecidas a alas que se sostienen sobre las costillas.
Cada una de las 50 especies conocidas de dragones voladores tiene esas membranas con diferentes tonalidades y dibujos.
Las membranas, que utilizan para desplazarse y escapar de los depredadores, también ayudan a los reptiles dragones voladores macho a exhibirse ante las hembras durante las exhibiciones de cortejo.