¿Qué causa la turbulencia en los aviones?
Un avión comercial pasa sobre Gravelly Point Park durante su aproximación de aterrizaje al Aeropuerto Nacional Reagan.
¿Quién no ha experimentado temor en un vuelo a causa de la turbulencia? Ese movimiento brusco del avión asusta y a veces incluso hace que se caigan cosas al suelo.
Cuando se viaja en avión, la turbulencia es muy común y puede ser una fuente de ansiedad para quienes ya tienen miedo a volar. Por eso, entender qué causa este fenómeno puede ser esencial para garantizar viajes más tranquilos, ya que se trata de un fenómeno que tiene su origen en la naturaleza.
¿Qué es la turbulencia?
La turbulencia es un movimiento irregular del flujo de aire, una fuerte corriente de viento que puede provocar movimientos ascendentes y descendentes sobre una aeronave durante un vuelo, explica la Agencia Nacional de Aviación Civil (Anac) de Brasil.
Entre sus diversas causas, las turbulencias pueden generarse por el movimiento del aire creado por la presión atmosférica, las corrientes en chorro, el aire alrededor de las montañas, los frentes meteorológicos fríos o cálidos, o incluso las tormentas, completa la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos.
Existen diferentes tipos de turbulencias que pueden afectar a un avión, como la turbulencia mecánica, la de estela y la térmica. Cada una de ellas causada por diferentes motivos. No obstante, el fenómeno también puede producirse de forma inesperada: cuando el cielo parece estar en calma y comienzan las turbulencias, se habla de "turbulencia de aire despejado", indica la organización oficial de aviación estadounidense.
¿Qué causa las turbulencias?
Descubre a continuación qué causa cada tipo de turbulencia y cómo se originan:
Turbulencia mecánica:
Este tipo puede ocurrir cuando una aeronave atraviesa flujos de viento procedentes de estructuras sólidas, como vientos entre montañas, edificios, colinas e incluso hangares de aeropuertos, señala la Anac.
En regiones de meseta, el terreno puede contribuir a la ocurrencia de "circulación de aire de montaña" y, por lo tanto, desencadenar intensos procesos de viento y generar turbulencia orográfica (un tipo de turbulencia mecánica que surge de la fricción del aire que sopla contra elevaciones montañosas).
La turbulencia generada por una onda de viento orográfica puede ser tan intensa como la causada por una fuerte tormenta eléctrica, informa la aviación civil brasileña.
Estela de turbulencia
Se trata de otro tipo de turbulencia que resulta, según la Anac, del paso de la aeronave por la atmósfera. En otras palabras, es el resultado del propio contacto del avión con el aire y se caracteriza por la aparición de vórtices de viento giratorios generados en las puntas de las alas de la aeronave.
Los vórtices de aire de las aeronaves más grandes suponen un peligro para la operación segura de las más pequeñas que pasan relativamente cerca. La fuerza del vórtice viene determinada por el peso, la velocidad y la forma del ala de la aeronave generadora, explica el organismo brasileño.
Incluso cuando la responsabilidad de evitar la estela de turbulencia recae en el piloto al mando del avión, los controladores de vuelo informan, en la medida de lo posible, a las aeronaves cercanas de la aparición prevista de estela de turbulencia. Sin embargo, la ocurrencia de peligros asociados no puede predecirse con exactitud y los controladores no pueden asumir la responsabilidad de emitir siempre advertencias sobre dichos peligros.
Turbulencia térmica
La turbulencia térmica está causada por el calentamiento solar de la superficie terrestre que, a su vez, calienta la atmósfera inferior dando lugar a corrientes de viento irregulares.
Las corrientes descendentes hacen que el avión se desvíe hacia abajo de su trayectoria normal y pueden incluso hacer que aterrice en la pista antes de lo deseado.
Las corrientes ascendentes, en cambio, fuerzan a la aeronave hacia arriba, resultando en un aterrizaje más lejano del punto deseado.
Turbulencia de aire claro
Un tipo peligroso es la turbulencia de aire claro. Esta puede suele ser repentina y severa, ocurre en regiones sin nubes, y causa ataques violentos a la estructura de la aeronave. Se trata de turbulencias de gran altitud, indica la Anac.
En algunos casos, aparecen en regiones de aire limpio, cerca de las tormentas. Esto se debe a que el rápido crecimiento de las nubes empuja el aire, lo cual genera ondas en la atmósfera que pueden convertirse en turbulencias a cientos o incluso miles de kilómetros de la propia tormenta.
Independientemente del tipo, las turbulencias y su intensidad suelen ser notificadas por los pilotos de las aeronaves, y los controladores de vuelo transmiten la información a otros aviones que se acercan a la zona en cuestión. Esta información sirve para alertar y prevenir inconvenientes.