Chile: identifican al primer mamífero del Mesozoico del país
Los restos fósiles del “Magallanodon baikashkenke” fueron hallados en el extremo sur del territorio chileno en afloramientos de unos 72 millones de años. Se trataría del registro más austral de un miembro del grupo de los Gondwanatheria.
Reconstrucción de Magallanodon baikashkenke, gondwanaterio del Cretácico Superior de Chile.
En un trabajo de investigación que contó con la participación de paleontólogos chilenos, argentinos y brasileros, este mes se presentó en sociedad al Magallanodon baikashkenke, el primer mamífero de la Era Mesozoica para Chile.
Recibe su nombre de Magallanodon que significa “el diente de la región de Magallanes” -en conmemoración a los 500 años de la circunnavegación de Hernando de Magallanes- y baikashkenke, que quiere decir “valle del abuelo” en lengua tehuelche, en referencia al Valle del Río de Las Chinas, en el extremo sur de Chile, donde fue encontrado.
El Dr. Agustín G. Martinelli (CONICET-MACN) y el Téc. Jonatan Kaluza (CONICET-Fundación Félix de Azara-Universidad Maimónides) trabajando en el sur de Chile, dentro de la carpa-laboratorio, en la búsqueda de indicios de restos de mamíferos cretácicos.
Según explican los expertos en la presentación de este trabajo, en América del Sur, hasta el momento, solo se conocían registros similares en la Patagonia Argentina y unos muy escasos restos en Brasil, Bolivia y Perú.
Los restos hallados en la región del Valle Río de las Chinas-Estancia Cerro Guido provienen de capas de la Formación Dorotea que tendrían una antigüedad de unos 72 millones de años de antigüedad, o sea, del Cretácico Superior, el último período de la Era Mesozoica. Entre los mismos, se han encontrado dientes incisivos y molares, en un excelente estado de preservación. Para el equipo de investigadores, esto indica que se trató de un animal “relativamente grande” para el Mesozoico, similar al tamaño de un Coipo y que poseía una dentición adaptada para procesar vegetales duros, como equisetales (cola de caballo) y posiblemente los primeros pastos del Período Cretácico.
Diente molariforme de Magallanodon baikashkenke, en todas sus vistas, como fue publicado.
Asimismo, la importancia de este hallazgo reside en que el Magallanodon representa “el registro más austral” de un miembro del grupo de los Gondwanatheria y una de las formas de mayor tamaño. El grupo de los gondwanaterios incluye animales con un aspecto similar a roedores, pero sin ningún parentesco. Restos de ejemplares de este grupo fueron encontrados en Madagascar, Tanzania e India, en rocas del Cretácico, y en la Argentina se los registra desde el Cretácico hasta el Eoceno (unos 40 millones de años). También existe un registro en el Eoceno de la Península Antártica.
“Haber trabajo en el campo y con la descripción de estos materiales ha sido un privilegio. Los materiales de Magallanodon tienen una importancia mundial para conocer mejor este enigmático grupo de mamíferos basales. Confiamos que más materiales aparecerán y podremos aportar más información relevante sobre la fauna de mamíferos que habitó el extremo sur de nuestro continente, al final del Mesozoico” comenta sobre el hallazgo el paleontólogo investigador del Conicet, Dr. Agustín G. Martinelli, de la Sección Paleontología de Vertebrados del MACN “Bernadino Rivadavia”.
El grupo de trabajo en los afloramientos de la Formación Dorotea, en donde fue encontrado el Magallanodon baikashkenke.
La investigación fue publicada en la revista del Boletín del Museo Nacional de Historia Natural de Chile, con participación de paleontólogos chilenos, argentinos y brasileros. Los trabajos de campo estuvieron liderados por los paleontólogos Dr. Marcelo Leppe del Instituto Antártico Chileno y el Dr. Alexander Vargas de la Red Paleontológica de la Universidad de Chile, que trabajan en la región hace más de 10 años.
Las instituciones involucradas en este trabajo incluyen, además, al Museo Nacional de Historia Natural de Chile, el Museo de La Plata (Argentina), el Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”-Conicet, a la Fundación Félix de Azara-Universidad Maimónides (Argentina) y a la Universidade do Vale do Rio dos Sinos (Brasil).
Fuentes:
- Dr. Agustín G. Martinelli, investigador del Conicet y miembro de la Sección Paleontología de Vertebrados del MACN “Bernadino Rivadavia”.