Ayrton Senna: ¿Quién fue el piloto sudamericano de F1 más famoso del mundo?
Ayrton Senna con el uniforme rojo que marcó su carrera. El brasileño se convirtió en uno de los pilotos más queridos y recordados de la historia del automovilismo mundial.
La historia del brasileño con sed de velocidad, Ayrton Senna, comenzó el 21 de marzo de 1960 en la ciudad de São Paulo, y terminó en un trágico accidente mortal que marcó la historia del automovilismo hace 30 años, el 1 de mayo de 1994 en el GP de San Marino, en Imola (Italia).
Durante sus 10 años como piloto de F1, Senna ganó 65 poles, realizó 161 largadas, sumó más de 600 puntos, 80 podios y 41 victorias, además de ganar tres títulos mundiales en 1988, 1990 y 1991, respectivamente, según consta en la página web oficial de la competencia deportiva.
Tres décadas después de su muerte, su carrera sigue vigente e inspira a pilotos de nuevas generaciones que admiran su legado, como el británico Lewis Hamilton, el alemán Sebastian Vettel y Franco Colapinto, un joven argentino que debutó este año en la Fórmula 1. Sigue su historia de victorias y amor por el automovilismo, que hizo de Senna uno de los deportistas más respetados del mundo.
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Ayrton Senna conduciendo durante el Gran Premio de Estados Unidos de 1991.
El inicio de la carrera de Ayrton Senna
Senna creció en una familia de clase media alta de la zona norte de São Paulo, propietaria de tierras y fábricas. “Beco”, apodo que le pusieron sus padres Neide y Milton, mostró su interés por los autos desde muy pequeño, una pasión que también compartía su padre. A los 4 años, Ayrton recibió de su padre su primer coche de carreras, un mini kart, rememora la página web oficial de la Fórmula 1.
La pasión por la velocidad continuó durante toda la infancia y adolescencia de Senna. A los 10 años ganó su primer kart de tamaño normal y empezó a correr en campeonatos oficiales en cuanto estuvo legalmente autorizado, a los 13 años. Más tarde, ganó el Campeonato Sudamericano de Karting en 1977 y 1978, detalla la Enciclopedia Britannica (una plataforma de conocimiento y educación).
En 1981, se trasladó a Inglaterra para correr en la Fórmula Ford 1600 y ganó varias carreras, pero lo dejó brevemente al final de la temporada para regresar a Brasil y unirse a la empresa familiar e ingresar en una escuela de negocios.
No obstante, su amor por el automovilismo siempre fue más fuerte. Como cuenta el sitio web oficial de Senna, junto con su familia, decidió seguir su vocación y regresó a Inglaterra en 1982 para pilotar allí la Fórmula Ford 2000 la temporada siguiente. En 1983, pasó a la Fórmula 3, convirtiéndose en campeón de la temporada en la categoría, lo que le valió una invitación para ser piloto de pruebas de Fórmula 1.
Ayrton Senna pilotando en el Gran Premio de Gran Bretaña en el circuito de Silverstone en 1993.
Ayrton Senna alcanza la gloria en la Fórmula 1 y el reconocimiento mundial
Fue en 1984, corriendo para el pequeño equipo Toleman, cuando comenzó la trayectoria que lo llevaría a convertirse en tricampeón de Fórmula 1 y en el piloto sudamericano más conocido y respetado del mundo hasta la actualidad.
Al año siguiente buscó un coche más competitivo en Lotus, y fue entonces cuando ganó un par de Grandes Premios por primera vez, el Gran Premio de Portugal y el Circuito de Spa-Francorchamps en Bélgica, terminando cuarto al final de la temporada de 1985, según Britannica.
Como revela la web de la competencia deportiva, el siguiente paso de Senna en la F1 llegó cuando McLaren lo fichó como nuevo compañero del entonces campeón, el francés Alain Prost, en 1988. Fue entonces cuando el deportista brasileño alcanzó nuevas metas al ganar ocho carreras y lograr varias poles, y allanar el camino hacia su primer título mundial por delante de Prost, pero las tensiones crecían entre ambos pilotos.
Tras el primer título de Senna, se convirtieron en protagonistas de una de las enemistades más infames de la Fórmula 1. En 1989, Prost ganó el título sacando al brasileño de la pista de Suzuka en el Gran Premio de Japón. En 1990, Senna ganó su segundo campeonato derribando al francés (entonces en Ferrari) en la primera curva de Suzuka. El tercer título de Senna, en 1991, fue el resultado de su dominio como piloto de alto nivel durante toda la temporada, así como de su búsqueda para ser aún mejor.
El piloto sudamericano quedó cuarto en el campeonato de 1992 y terminó segundo por detrás de Prost en 1993, pero terminó la temporada en lo más alto, ganando la última carrera del año, que resultaría ser su última victoria en una competencia. Al año siguiente se unió al equipo Williams.
En diciembre de 2019 se inauguró una escultura de Ayrton Senna en tamaño real en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, Brasil.
Un grafiti de Ayrton Senna en el circuito de Catalunya, en Barcelona, hecho para el Gran Premio de España de 2020.
El trágico final de Ayrton Senna y su legado
El año 1994 marcó el final de una era en el automovilismo con la muerte de Ayrton Senna televisada en todo el mundo, planteando además varios problemas de seguridad en la categoría. Justo ese año se habían producido algunos cambios técnicos en la F1, entre ellos la prohibición de las “ayudas electrónicas al piloto”, lo que hizo que la adaptación del piloto a Williams fuera más difícil de lo esperado.
El GP de San Marino (en Imola, Italia) se convirtió en uno de los escenarios más trágicos de la historia de esa competencia deportiva. Durante la clasificación, el piloto austriaco Roland Ratzenberger murió en un accidente. Y un día después, el 1 de mayo de 1994, Ayrton Senna perdió la vida nada más empezar la carrera, con solo 34 años, al estrellarse violentamente contra el muro a la salida de la curva Tamburello a gran velocidad.
El sitio web oficial de la F1 afirma en su página del Salón de la Fama que, “además de ser un genio de la conducción, era una de las personalidades más atractivas del deporte. Aunque de baja estatura, poseía una poderosa presencia física y cuando hablaba sus ojos brillaban y su elocuencia era fascinante. Sus impresionantes actuaciones fueron captadas por los medios de comunicación y el mundo entero se dio cuenta del atractivo magnético de Senna”.
Además de ganar seguidores en todo el mundo, el famoso automovilista dejó un legado inspirador, ya que donó millones de su fortuna personal para ayudar a los niños desfavorecidos de Brasil durante su vida, al tiempo que sentaba las bases de una institución que llevaría su nombre.
En noviembre de 1994, pocos meses después de su muerte (que provocó tres días de luto nacional y cerca de medio millón de personas que salieron a la calle para asistir a su funeral), la familia de Senna, con su hermana Viviane al frente, fundó oficialmente el Instituto Ayrton Senna.
Su vida dio lugar a varios libros biográficos, documentales y series de ficción que tratan de mantener vivo el recuerdo de este héroe del deporte.