Buenas noticias para los elefantes: Cerrará un importante mercado de marfil
El inminente cierre de las ventas legales de marfil de Hong Kong parece significar menos caza furtiva de elefantes para obtener sus colmillos.
Es oficial: Hong Kong (un mercado importante de marfil de elefantes) pondrá fin a las ventas del “oro blanco” a fines de 2021.
Los legisladores le dieron luz verde el 31 de enero a un plan de cuatro años que podría eliminar gradualmente el mercado minorista legal de la ciudad estado, lo cual los ecologistas y defensores dicen que ayuda a alimentar la matanza de más de 30 000 elefantes africanos al año al utilizarse como pantalla para el comercio de marfil en el mercado negro. La medida, la cual la Associated Press reportó que fue aprobada por 49 votos a favor y 4 en contra, se aprueba más de dos años después de que el jefe ejecutivo de Hong Kong Leung Chun-ying prometiera cerrar el mercado del marfil, y más de un año después de que el gobierno presentara un plan para terminar con la venta.
Además de cerrar el mercado del marfil, el plan también incluye penas más severas para los contrabandistas: En el marco de la nueva ley, la sentencia máxima de prisión aumentará de dos años a 10, y la multa se duplicará a USD 1,3 millones.
Los ecologistas celebraron las noticias pero expresaron reservas sobre el extenso programa para cerrar las tiendas de marfil.
“Todo paso positivo que tenga que ver con los elefantes son buenas noticias”, dice Philip Muruthi, vicepresidente de protección de especies de la
African Wildlife Foundation en Nairobi. “Pero la urgencia del problema en lo que concierne a los elefantes no se ha estado tomando en serio”.
De hecho, los elefantes están siendo asesinados de forma indiscriminada por sus colmillos, los cuales se tallan para crear desde obras de arte hasta palillos chinos, y se venden (de forma ilegal) a través de las fronteras, aunque los países son libres de permitir las ventas domésticas. Solo quedan aproximadamente 350 000 elefantes africanos, una gran pérdida con respecto a los cerca de 490 000 que había hace una década, con la caza furtiva como principal culpable de la disminución constante.
China continental, que cerró su comercio legal de marfil el año pasado, es el consumidor de marfil más grande del mundo. Debido a la proximidad de Hong Kong con China, y la existencia de su propio mercado legal en auge, también ha surgido como un impulsor clave de la crisis de la caza furtiva.
Como informó Laurel Neme para Wildlife Watch en junio de 2016:
Decenas de miles de artículos hechos de marfil se exhiben para su venta en zonas turísticas caras [en Hong Kong] mientras que incautaciones de enormes cantidades de marfil por parte de las autoridades aduaneras confirman que es un centro de contrabando de marfil.
Luego de que se prohibiera el comercio internacional de marfil en 1989, la ciudad estado estableció un sistema de licencias para las reservas de marfil existentes adquiridas legalmente propiedad de comerciantes privados, que en ese entonces sumaban un total de 665 toneladas métricas. Estudios sugieren que ese monto se debería haber agotado en 2004, pero en la actualidad aproximadamente 370 comerciantes de marfil con licencia poseen en forma colectiva alrededor de 77 toneladas de marfil.
Investigaciones encubiertas citadas por Neme revelaron que los comerciantes de Hong Kong reponen de forma habitual sus existencias de marfil legales con marfil del mercado negro, lo cual se facilita en parte debido a que un requisito de que las licencias registran solo el peso del marfil y no productos específicos.
Los propietarios de las tiendas de marfil y los comerciantes con licencia no serán compensados dentro del marco del plan de cierre del mercado, aunque la Associated Press informó que demandaron decenas de millones de dólares a cambio de ceder sus existencias de marfil. El periodo de gracia de tres años, así como el hecho de que los comerciantes por lo general confían en el marfil como solo una pequeña parte de su negocio, fueron algunas razones para negarles el pago.
Un periodo de tres años para cerrar el mercado del marfil significa que la ejecución es importante, dice Richard Thomas, portavoz de TRAFFIC, la organización de monitoreo del comercio de la vida silvestre. “Con la implementación tardía de la prohibición de Hong Kong, quienes tengan marfil en China continental pueden percibir una posible puerta trasera para descargar sus existencias”, afirma. “Será crucial monitorear de cerca y documentar las existencias de marfil y asegurar las fronteras para garantizar que esta puerta permanezca totalmente cerrada”.
Muruthi añade que espera que la decisión de Hong Kong estimule a otros países (como Tailandia, Vietnam y Laos) a cerrar sus mercados legales, en especial porque el lavado del marfil ilegal es un problema en expansión y el cierre de las tiendas de China puede que pronto haga que quienes buscan marfil comiencen a mirar hacia otros lados.