Descubre 4 formas de celebrar el Carnaval de Brasil
De las suntuosas actuaciones de las escuelas de samba a las celebraciones callejeras de los grupos carnavalescos: no faltan opciones y formas de celebrar el evento en Brasil.
El Carnaval de Brasil acapara las miradas. En la imagen se observa a la escuela de samba Imperatriz Leopoldinense, campeona 2023 del grupo especial del desfile de carnaval de Río de Janeiro.
El carnaval está presente en muchas partes del mundo, ya que es una fiesta de origen antiguo que se remonta a las costumbres católicas del Imperio Romano y que se ha extendido por varios continentes, explica la Enciclopedia Britannica.
La celebración también existe en ciudades como Venecia, en Italia; Niza, en Francia; y Barranquilla, en Colombia. En Brasil, el carnaval se ha convertido en parte de la identidad cultural del país y es uno de los eventos más importantes y esperados del año.
Además de ser una gran fiesta popular, el Carnaval de Brasil también genera grandes ingresos económicos. Al fin y al cabo, el país recibe turistas de todo el mundo. De hecho, se espera que lleguen al país unos 200 000 turistas extranjeros en 2024 que generarán 900 millones de reales (la moneda local), según una estimación de la Agencia Brasileña de Promoción del Turismo Internacional (Embratur).
Pero como Brasil tiene dimensiones continentales, los "tipos" de festividades son variados y el carnaval puede celebrarse de diferentes maneras.
Hay quienes prefieren bailar al son del frevo (un ritmo musical) en las laderas de Olinda, en Pernambuco (al noreste del país), quienes prefieren los tambores y los surdos (un instrumento de percusión) de las escuelas de samba (asociaciones tradicionales reconocidas por realizar los desfiles callejeros que solo tocan samba como ritmo musica), el axé bahiano (una danza y ritmo musical) e incluso quien prefiere bailar los ritmos más variados en los bloques callejeros (grupos carnavalescos) de todo el país.
Descubre cuatro formas de experimentar el Carnaval en Brasil, prepara tu disfraz y celebra la mayor fiesta del mundo de la forma que prefieras.
1. Escucha la música típica del carnaval en Pernambuco
Traje de un personaje típico maracatu. La foto retrata un desfile callejero en Olinda (Pernambuco) en el carnaval de 2018.
El Carnaval de Pernambuco es único por sus manifestaciones típicas de la cultura popular local, como el frevo, el maracatu (ambos ritmos musicales) y las inconfundibles marionetas gigantes. La fiesta engloba tradiciones de origen lusitano, pero redimensionadas por la influencia de las culturas africana e indígena a partir de sus ritmos, danzas y valores estéticos, según consta en la página web de la Agencia del Senado del gobierno federal.
El frevo es un elemento esencial del carnaval de Pernambuco y quienes acuden allí para disfrutar de las fiestas pueden admirar los colores de los trajes de los bailarines, la música y el frenético baile por las calles de las ciudades de Recife y Olinda. Los orígenes musicales del frevo se remontan a mediados del siglo XIX, explica el sitio web Educação Pública, del gobierno del estado de Río de Janeiro.
El origen del maracatu, conforme con la misma web educativa, se remonta a las coronaciones de los reyes del Congo y Angola. El ritmo musical se menciona en documentos del siglo XVIII, especialmente en las fiestas religiosas católicas de Nossa Senhora dos Prazeres y Nossa Senhora do Rosário de Santo Antônio, realizadas en ese estado brasileño.
A mediados de la década de 1850, el término "maracatu" ya se utilizaba para referirse a las reuniones musicales de las personas que aún eran esclavas. Los desfiles de música y danza estaban presentes en el carnaval, incluida la muñeca calunga, uno de los elementos sagrados del maracatu.
Quien vaya a Pernambuco a disfrutar del evento puede disfrutar de muchos espectáculos y bloques de frevo y maracatu, aunque también hay espacio para otros ritmos carnavalescos. En la zona nororiental de Pernambuco se celebra el mayor desfile de carnaval del mundo, reconocido por el Libro Guinness de los Récords.
Se trata del Galo da Madrugada, que en su primer desfile, en 1978, contó con solo 75 personas, pero que actualmente convoca a miles de personas que siguen a la enorme marioneta con forma de gallo. En sus últimas actuaciones, llegó a reunir hasta 2.3 millones de personas, según su web oficial.
2. Danza al compás de los ritmos locales en el Carnaval de Salvador
Uno de los grupos de afoxé más tradicionales del carnaval de Salvador (Bahía), es el Afoxé Filhos de Gandhy. En esta imagen, la agrupación desfila por las calles del centro de la ciudad en 2017.
El Carnaval de Bahía tiene su centro festivo en su capital, Salvador. La conexión de la ciudad con sus raíces africanas está latente en todas sus representaciones culturales y en la música no es diferente. Como explica un artículo de National Geographic, desde el origen de la samba hasta la aparición del afoxé y sus ritmos posteriores, son muchas las manifestaciones musicales típicas del estado.
Uno de los ejemplos más característicos son los afoxés, desfiles afrobrasileños vinculados a la religiosidad del candomblé, con vestimentas y música que contienen elementos de la cultura yoruba, define un artículo sobre el tema publicado por la Escuela Paulo Freire, un organismo educativo oficial del ayuntamiento de Río de Janeiro.
Entre los diversos grupos de afoxé que siguen presentes hoy en día en el Carnaval de Bahía se encuentra el bloque Afoxé Filhos de Gandhy (fundado en 1949), que es el más grande y famoso. En 2024, esta agrupación celebrará sus 75 años de existencia con un homenaje al cantante y compositor Caetano Veloso, detalla su página oficial en las redes sociales.
Otro ritmo que es la cara del carnaval de Salvador es la música axé, un gran encuentro musical, explica un artículo de Agencia Brasil, la agencia de noticias del gobierno brasileño. En ese escrito, Paulo Miguez, profesor y rector de la Universidad Federal de Bahía (UFBA), que también es especialista en el carnaval, afirma que la mezcla de géneros de la música axé es positiva.
"El axé se compone de diferentes formas, es la unión de la música de los afro bloques, los tríos eléctricos (camiones equipados con sistemas de sonido) y el afoxé. Representa un signo de la vitalidad del carnaval", explica. El pagode bahiano, por su parte, es el "hijo" de la samba de la región del recôncavo bahiano, pero incorpora ritmos electrónicos e incluso funk, y es más sincopado y rápido que el pagode melódico de Río de Janeiro y San Pablo.
En Salvador, el carnaval se desarrolla en dos circuitos principales: Barra-Ondina y Campo Grande, con multitud de desfiles de tríos elétricos y bloques en los que la gente puede seguir bailando en las calles al son de los espectáculos (algunos pagos y otros gratuitos) o disfrutar del desfile desde una cabaña frente al recorrido.
3. Contempla las escuelas de samba en los desfiles de San Pablo y Río de Janeiro
Imagen del sambódromo Marqués de Sapucaí abarrotado para ver el desfile de la escuela de samba Imperatriz Leopoldinense, ganadora de la agrupación especial del carnaval 2023 en Río de Janeiro.
Los colores, la purpurina, los magníficos disfraces y las exuberantes carrozas se han convertido en un símbolo del Carnaval de Brasil para el mundo. Pero todo esto representa solo una faceta de la fiesta en el país. Retransmitidos en directo por televisión, los desfiles de las escuelas de samba se han asociado a la fiesta y son una parte importante de la celebración del carnaval en el país.
Estos desfiles tienen su origen en los antiguos "ranchos carnavalescos" de finales del siglo XIX en Río de Janeiro, describe un artículo de la Agencia Brasil. El primer concurso de desfiles de ranchos se celebró en 1909.
En el concurso ya era obligatorio desarrollar un tema con abre-alas (un carro que abre el desfile e identifica a la escuela de samba), un comité frontal (el primer grupo de participantes del desfile), alegorías (cada uno de los carros que participan del desfile), un maestro y una abanderada (responsables de llevar el estandarte de la escuela y de presentar la danza) y una orquesta, además de una coreografía obligatoria, muy similar a lo que todavía se exige.
Desde la década de 1930, cuando se celebraron los primeros desfiles oficiales en Brasil, las escuelas de samba han evolucionado y se han expandido hasta nuestros días, en los que varias ciudades brasileñas cuentan con escuelas de samba. Los mayores y más imponentes desfiles de carnaval tienen lugar en Río de Janeiro y San Pablo, las ciudades que concentran las principales escuelas de samba que actúan cada año.
Los aficionados pueden disfrutarlos desfilando (para ello hay que ser miembro de una de las escuelas) o viéndolo en directo, ya sea en persona en el sambódromo o por televisión.
Río de Janeiro cuenta con más de 70 escuelas de samba en total, y las 12 escuelas del grupo especial (que es el grupo principal) desfilan siempre los domingos y los lunes, según datos del sitio web Carnaval.rio de la ciudad.
En la capital de Río de Janeiro, los desfiles tienen lugar en el Marqués de Sapucaí, una exclusiva avenida diseñada por el arquitecto Oscar Niemeyer, icono del modernismo y responsable del diseño de la ciudad de Brasilia. Inaugurado en 1984, el Sapucaí se ha convertido en el escenario oficial de los desfiles cariocas, alejándolos de las calles del centro de la ciudad.
San Pablo cuenta actualmente con 33 asociaciones, 14 de las cuales pertenecen al grupo especial, que tradicionalmente desfila los viernes y sábados de Carnaval, de acuerdo con el sitio oficial de la Liga de Escuelas de Samba de San Pablo.
Al principio, las actuaciones en la capital paulista también se celebraban en avenidas del centro de la ciudad (como São João y Tiradentes), pero en 1991 también se inauguró el Sambódromo do Anhembi, con un diseño de Oscar Niemeyer. Poco a poco, el recinto se fue ampliando y hoy puede albergar a más de 30 000 personas para presenciar los desfiles de carnaval.
Otras grandes ciudades brasileñas también tienen este tipo de desfiles, como Brasilia (en el Distrito Federal), Porto Alegre (en Río Grande do Sul), Vitória (en Espírito Santo) y Belo Horizonte (en Minas Gerais).
4. Sigue a los bloques por las calles de Brasil
La animación de los músicos del grupo carnavalesco Céu da Terra por las calles repletas de juerguistas en Río de Janeiro durante el pre-carnaval 2024.
Desde principios del siglo XX, con la aparición de los primeros desfiles callejeros, hasta nuestros días, los grupos carnavalescos han tomado las calles de miles de ciudades de todo el país, refiere un artículo de National Geographic Brasil titulado: Carnaval: qual a origem dos blocos de rua?.
Los ritmos musicales de los grupos carnavalescos son de lo más variado. Puedes seguir a un grupo que solo toca marchinhas tradicionales de carnaval, a otro que toca música bahiana, forró, música popular brasileña (MPB) ¡e incluso rock!
Río de Janeiro cuenta con más de 400 desfiles callejeros y es la cuna de uno de los primeros desfiles callejeros, que continúa actualmente. Se trata del Cordão do Bola Preta, fundado en 1918. San Pablo, por su parte, también ha visto crecer su carnaval callejero en los últimos diez años y acoge alrededor de 500 bloques que atraen a juerguistas de Brasil y del extranjero, tal como reflejan los datos de los respectivos ayuntamientos.
Otras ciudades como Fortaleza (en Ceará), Belo Horizonte, Ouro Preto y otras ciudades del circuito histórico de Minas Gerais, así como Porto Alegre (en Río Grande do Sul), Florianópolis (en Santa Catarina) y Brasilia (en el Distrito Federal) también tienen sus propios bloques callejeros durante los días de Carnaval, para deleite de los juerguistas que esperan diversión gratuita.
Otra forma de celebrar el carnaval es participar en los tradicionales bailes y fiestas que se celebran en discotecas y centros de eventos. Esto era muy común en otras décadas, pero aún existe y atrae a quienes quieren festejar por la noche, lejos del calor de las calles y avenidas.