ADN: Aprende más sobre el elemento fundamental de la vida
El ADN es una molécula que existe en casi todos los seres vivos; esta les dice cómo deberían verse y funcionar.
Mira detenidamente a alguien que amas. Presta atención a las curvas de su sonrisa y a la manera especial en que su frente se arruga cuando ríe. La próxima vez que estrechen manos, echa un vistazo a la forma de sus dedos.
Esta es la manera de ver las complejidades del ADN de las personas sin tener que pisar un sofisticado laboratorio.
Química y un poco más
EL ADN, o ácido desoxirribonucleico, es una molécula que se encuentra en todas las células de casi todos los seres vivos. Ayuda a las células a producir proteínas, que son necesarias para sobrevivir, y facilita la reproducción. Mil veces más fino que cualquiera de los pelos de tu cabeza, una hebra de ADN consiste de tres elementos químicos esenciales: un grupo azucarero, un grupo de fosfato y una de las cuatro bases nitrogenadas.
En 1953, la comunidad científica propuso que el ADN fuera estructurado como una doble hélice, con las bases químicas [adenina (A), citosina (C), guanina (G) y timina (T)] amontonadas en pares entre dos combinaciones de azúcar y fosfato. Imagina una escalera caracol: el azúcar y el fosfato serían los listones laterales, y los pares de base los peldaños.
El orden, o la secuencia, de estos pares de bases es fundamental ya que determina el código genético que da origen a formas de vida específicas, desde seres humanos hasta hámsters e hibiscos.
El ADN humano tiene, aproximadamente, tres mil millones de bases y el 99 por ciento de ellas son exactamente iguales en cada individuo. Estas bases forman el proyecto que genera los rasgos comunes que son las características de nuestra especie. El restante uno por ciento es el responsable de las infinitas particularidades de cada individuo, como el color de ojos, el tono de la piel y la forma del cuerpo, que son los que nos hacen únicos.
¿Dónde está el ADN en el cuerpo?
El ADN existe dentro del núcleo de cada una de las células del cuerpo. Los cromosomas son los que tienen porciones de ADN estrechamente unidas en paquetes. La mayoría de las personas posee 23 pares de cromosomas, que hacen un total de 46 pares. De estos pares, 22 son los mismos para todos, mientras que uno (el par X e Y denominado cromosoma sexual) es el responsable de los rasgos femeninos o masculinos.Cada cromosoma contiene muchos genes, que son tramos de ADN que le dicen a la célula exactamente cómo construir las proteínas necesarias para crear y mantener las formas de vida. Los genes son las unidades básicas de la herencia.
El legado
Como el ADN de una persona debe ser exactamente igual en todas las células del cuerpo, posee la fascinante habilidad de hacer copias de sí mismo. Así es cómo guarda la información genética y se asegura de que cuando una célula se divide, las nuevas células contengan réplicas exactas del ADN de la célula original.
El ADN, usualmente conocido como el material hereditario del cuerpo, es transmitido de padres a hijos en el proceso reproductivo. Cada persona tiene dos copias de cada gen: una heredada de la madre y otra del padre. Los rasgos hereditarios se expresan por medio de los genes; es por ello que un niño puede tener “la misma” nariz que su padre, o que los hermanos pueden presentar cierta similitud entre ellos.
El momento del cambio
Sin embargo, como sucede con todo en la naturaleza, el ADN no es perfecto y, al hacer copias, pueden aparecer errores. Asimismo, el ADN es susceptible a los factores ambientales como el humo del cigarrillo y la luz ultravioleta. Los cambios en la secuencia de ADN en nuestros genes se denominan mutaciones, las cuales pueden ser tanto hereditarias como adquiridas.
Un pequeño porcentaje de las mutaciones genéticas puede causar problemas de salud serios—una categoría de enfermedad que se denomina trastorno genético. Algunos ejemplos de trastornos genéticos son la fibrosis quística y la anemia drepanocítica. El cáncer puede ser producto de las mutaciones genéticas que fueron heredadas o de aquellas que fueron adquiridas por la exposición a distintos factores ambientales nocivos. Las mutaciones genéticas que suceden dentro de un embrión en desarrollo pueden ocasionar un aborto o afecciones como la Trisomía 21, también conocida como Sindrome de Down.
La buena noticia es que, con frecuencia, las células pueden reparar una mutación genética antes de que se vuelva permanente. Y, aunque esto suceda, la gran mayoría de las mutaciones no supone un riesgo para la salud en lo absoluto.
Fuentes:
- National Institutes of Health: Genetics Home Reference
- National Human Genome Research Institute: DNA
- Modern Genetic Analysis. Griffiths AJF, Gelbart WM, Miller JH, et al.
- The Cell: A Molecular Approach. 2da edición. Cooper GM