¿Cuál es el origen del pistacho?
Los pistachos crecen en racimos y están envueltos en una "cáscara carnosa". Maduran a finales de verano (o principios de otoño) y su cáscara se vuelve rosada.
El pistacho es un fruto seco que acompaña a la humanidad desde hace cientos de años y se ha utilizado como medicamento y afrodisíaco, indica la Biblioteca Nacional de Medicina (NLM, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
Este alimento tiene incluso una fecha que promueve su valorización: cada 26 de febrero se celebra el Día Mundial del Pistacho, un fruto seco que ha demostrado tener beneficios para la salud cuando se consume.
Tan populares hoy en día en la alimentación de las personas en muchas partes del mundo, los pistachos han sido un éxito desde la antigüedad. Explora más información sobre su origen.
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De todos los frutos secos, los pistachos tienen los niveles más altos de potasio.
¿Cuál es el origen del pistacho?
El pistacho es un tipo de fruto seco que procede de la Pistacia Vera, una planta originaria de Oriente Medio, más concretamente de zonas montañosas de Siria, Turquía, Irán y Afganistán, señala un artículo de National Geographic España sobre este alimento. Prospera en climas cálidos.
Aunque no se sabe exactamente cuándo empezó a ser utilizado por las personas, un manuscrito de principios del siglo VI a.C. menciona la presencia de pistachos en Europa. "Otros relatos hablan de su presencia en los Jardines Colgantes de Babilonia, una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo", refiere el texto español.
En ciertas culturas de Oriente Próximo, sentarse bajo los árboles de pistacho y escuchar el sonido del fruto maduro al abrirse era señal de buena suerte, continúa el artículo de NatGeo España. Pero también se sabe que su cultivo estaba muy extendido en el antiguo Imperio Persa, según la NLM.
Oxford Academic (una plataforma de la Universidad de Oxford en el Reino Unido que promueve la educación) recuerda una leyenda sobre el consumo de pistachos en la antigüedad, en la que la reina de Saba (un reino del sur de la península arábiga, cerca del Mar Rojo) decretó que el alimento era exclusivo de la realeza.
La fuente también señala que en el siglo I d.C., los pistachos se consideraban un fruto seco apreciado en Roma.
Hoy en día, a medida que estos frutos se han ido comercializando ampliamente, las plantaciones han ido extendiéndose más allá de estas regiones originales y se producen en otras partes del mundo, como Australia, México, España y Estados Unidos. Irán y California son los mayores productores de pistacho del mundo, cada uno de los cuales produce varios cientos de millones de libras al año, señala Oxford Academic.
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Según un artículo de Oxford Academic, los pistachos son verdes y morados (en algunas de sus partes internas) como resultado de la acción de dos sustancias: la luteína (un carotenoide de color amarillo limón) y la antocianina (responsable de dar a los alimentos un color violáceo).
¿Por qué los pistachos son verdes?
Ricos en nutrientes, como ácidos grasos cardiosaludables, potasio, magnesio, vitamina K y varios tipos de fitoquímicos (compuestos químicos de las plantas), los pistachos tienen un color característico.
El artículo de Oxford Academic sobre este alimento explica que los pistachos son verdes (y morados en algunas de sus partes interiores) como resultado de la acción de dos sustancias: la luteína (un carotenoide de color amarillo limón que también se encuentra en verduras como las espinacas, los calabacines, el coliflor, los guisantes y el brécol, por ejemplo); y la antocianina, un compuesto químico que confiere a los alimentos un color violáceo (y que está presente en las grosellas negras y los arándanos).
Oxford Academic afirma que, de todos los frutos secos, los pistachos tienen los niveles más altos de potasio.
La fuente detalla que estos crecen en racimos similares a las uvas, pero, al igual que las almendras, están envueltos en una "cáscara carnosa". Los frutos verdes maduran a finales de verano (o principios de otoño) y su cáscara se vuelve rosada. La cáscara interior se rompe de forma natural, protegiendo su precioso interior verdoso.