Qué efectos genera la pérdida de Humedales
Los humedales cubren el 6% de la superficie terrestre.
Los humedales montanos reciben su agua tanto de la precipitación como del agua de deshielo glacial. Aunque los humedales pueden formarse en una amplia gama de condiciones, cada uno está ligado a un agua en particular régimen. A medida que nuestro clima cálido cambia los patrones de lluvia y reduce los glaciares. Es posible que los hábitats especializados no puedan adaptarse lo suficientemente rápido.
La existencia de los humedales ofrece un sinnúmero de beneficios para el medio ambiente y para las personas. Sin embargo, su existencia se encuentra seriamente comprometida.
Se calcula que los cambios adversos en los humedales, incluidos los arrecifes de coral, tienen como resultado la pérdida anual de servicios de los ecosistemas por más de 20 billones de dólares estadounidenses, advierte una nota informativa de la Convención de Ramsar.
Entre los fenómenos que pueden ocurrir como consecuencia de su pérdida y degradación se encuentra la aceleración del ciclo del agua, advierte el capítulo Vivir sin humedales, escrito por Patricia Kandus y Priscilla Minotti, del libro Agua + Humedales publicado por la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM Edita) en 2018.
Según explica el escrito, al eliminar los humedales, el agua dulce circula más rápidamente por los canales naturales y artificiales camino al mar, donde se mezcla con el agua salada.
Sumado a eso, “la falta de cobertura vegetal natural por el avance de la agricultura industrial lleva a una pérdida de la amortiguación del impacto de la precipitación sobre el suelo, aumentando los valores de escorrentía superficial y el arrastre de partículas de suelo, nutrientes y contaminantes”.
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A su vez, el arrastre de las lluvias producido por la falta de humedales puede impactar directamente sobre los cursos de agua, aumentando la turbidez y disminuyendo la calidad del agua, afirma el capítulo.
Por otra parte, un folleto informativo difundido por el sitio web del Día Mundial de los Humedales agrega que la explotación minera de los arrecifes de coral puede dejar la costa expuesta a olas más fuertes de lo normal.
En tanto, agrega el folleto, la tala de manglares (por ejemplo para crear pesquerías de camarones y salinas) elimina la barrera costera natural y reduce el almacenamiento de carbono.
Por último, se estima que las turberas contienen el 30% de todo el carbono almacenado en la tierra. Por lo tanto, la quema y drenaje de las mismas libera dióxido de carbono (CO2) en grandes cantidades.
